El pintor Matías Moreno
1867. , 81 x 61,5 cmSala 062A
Charles Durant, llamado Carolus-Duran, es todavía un pintor mal conocido a pesar del éxito que gozó en el París de finales del siglo XIX, encarnando el prototipo de artista caído en el olvido después de haber vivido colmado de honores. En el Salon de 1866 alcanza una medalla con El asesinado, adquirido en 5.000 francos por el Estado para el Museo de Lille. Esta suma de dinero le permite viajar a España, donde permanecerá durante tres años para copiar a los grandes maestros, particularmente a Velázquez. Por lo que se refiere a su estilo, es evidente que las obras de juventud son las más intensas, tanto sus bocetos como sus trabajos de taller. Particularmente sensible a los contrastes luminosos, prefería los fondos neutros y los toques anchos de pincel. El arte de Velázquez le hizo evolucionar hacia el retrato realista, no desprovisto de un innegable virtuosismo. Con el tiempo su paleta se aclara y los contornos de sus retratos se difuminan para conseguir armonías de colores de gran transparencia, donde el efecto de la puesta en escena cuenta más que la psicología de los modelos.
Esta obra pertenece al período de juventud, quizá el de mayor originalidad de toda su trayectoria. Por otra parte, las carnaciones están resueltas con precisión y riqueza de matices, mientras que el efecto psicológico queda espléndidamente plasmado por la inteligencia de la mirada y el nerviosismo de toque.
No se conoce réplica o copia de la presente obra, que constituye un singular testimonio de este momento de la carrera del artista, en que ya es reconocido como maestro absoluto (Texto extractado de: Louis Augé, J., Artistas pintados. Retratos de pintores y escultores del siglo XIX en el Museo del Prado, Madrid: Museo del Prado, 1997, p. 124-127).
El personaje retratado es el pintor Matías Moreno González (Fuente el Saz, Madrid, 1840-Toledo, 1906), del que se conservan pinturas en el Museo del Prado. (Texto extractado de: Pintura del Siglo XIX en el Museo del Prado, Madrid: Museo Nacional del Prado, 2015, p. 158).