Tulia
1891. , 58 x 44 cmDepósito en otra institución
La romana Tulia fue hija del gobernador Servio Tulio (578-534 A. de C.). La leyenda cuenta que se hizo cómplice de su marido para asesinar a su padre, consumado lo cual pasó su carro sobre su cadáver por una calle que se llamó después Vicus Sceleratus.
La historia de Tulia llamó poderosamente la atención a Querol, que la utilizaría recurrentemente en sus años romanos. Primero esculpió un relieve (sin localizar, probablemente destruido) con la escena más dramática del episodio narrado por Tito Livio, relativo a la feroz hija de Servio Tulio. Lucio Tarquino, nieto del antecesor político de Servio Tulio, quiso destronarle y contó con la ayuda de su esposa, Tulia, que sorprendentemente era la hija de Servio Tulio, y actuó en contra de su padre. Querol encontró en la historia de Tulia una ocasión de desarrollar esa búsqueda expresiva y realista que tanto le interesaba, y modeló un par de años después, exclusivamente, la cabeza de la enérgica Tulia, de mirada orgullosa, arrogante y valiente, en una composición de gran efectismo, y que presenta un magnífico estudio de paños. De esta cabeza, el Museo Nacional del Prado posee dos versiones, ambas firmadas en Roma (E799 y E908), y en ambas con un elemento del mundo clásico, la moneda que sirve de prendedor de la indumentaria.
Este busto de Tulia, esculpido en mármol de Carrara sobre una base ornamental con decoración vegetal, obtuvo primera medalla en la Exposición Nacional de 1895. El escultor lo ofreció al Estado, que lo adquirió en 5.000 pesetas por Real Orden de 31 de julio de 1895. La cruel Tulia, vestida con una túnica romana desafiante y altiva, mantiene la severidad de la expresión. El cabello, que enmarca con sus rizos el rostro, se recoge en un sencillo tocado a la romana. Ya figuró en la colección inicial del Museo de Arte Moderno. Querol propuso llevarla a la Exposición Universal de París en 1900, aunque no figura sin embargo entre las ocho obras que se mencionan en el catálogo. Probablemente es el ejemplar del que más versiones se encuentran: en el Museo Municipal de Tenerife, en el Museo de Bellas Artes de Córdoba, en colección particular, otra que se encontraba en el Museo de Tortosa (hoy sin localizar) y varias subastadas en los últimos años.
Azcue Brea, Leticia, El talento escultórico: una mirada a la formación de Agustín Querol (1860-1909). Studi di scultura: etá moderna e contemporanea., 2020, p.93-119 [100-102 f.9]