Hércules
Mediados del siglo II. , 149 x 66 cmSala 072
Los atributos antiguos, sostenidos por el brazo izquierdo, señalan a la pequeña estatua de mármol como el héroe argivo Heracles, que a la vez era semidiós por sus padres Zeus y Alcmena. La piel del león de Heracles, representada desde el siglo VI a. C. hace referencia a su primer trabajo realizado para Euristeo de Tirinto, a saber: la muerte del león invulnerable de Nemea; la manzana en su mano izquierda, en cambio evoca su penúltima aventura canónica, esto es, el robo de las manzanas de las Hespérides. Ya a mediados del siglo V a. C., en una metopa del templo de Hefesto en Atenas, el héroe fue representado con las manzanas en la mano. El restaurador moderno completó con razón la maza en la mano derecha que, sin embargo, antes probablemente estuviera en una posición más vertical, en tanto el antebrazo derecho, completado, apenas aparecería doblado hacia adentro en la vista frontal. La cabeza completada data del siglo XVII. Dado que en esta época también los hombros fueron retocados en la parte posterior, hoy no es posible definir hacia qué lado estaba girada originalmente la cabeza, ni tampoco si Hércules tenía barba.
El cuerpo atlético del héroe, que fue admitido en el Olimpo gracias a sus colosales trabajos, se caracteriza por formas corporales discretas, pero claramente destacadas: hombros fuertemente modelados y bíceps anchos en la vista de perfil, músculos pectorales de forma casi rectangular, caja torácica ancha y ligeramente sobresaliente, vientre protuberante por debajo del pequeño ombligo, así como líneas inguinales bien marcadas. La mitad derecha de la figura aparece distendida, con la pierna libre y la cadera inclinada y con el hombro erguido, la mitad izquierda del cuerpo se contrae, con la cadera empujada hacia arriba por la pierna de apoyo y con el hombro ligeramente descendente. El busto está levemente girado hacia la izquierda y el hombro izquierdo retraído.
Los componentes del estilo helenístico han cedido casi completamente el paso a los elementos estilísticos clásicos. Es una obra típica de las corrientes artísticas eclécticas establecidas en época tardohelenística (Texto extractado de Schröder, S. F.: Catálogo de la escultura clásica, Museo Nacional del Prado, 2004, pp. 338-341).